Los carceleros obligaban a jugar a sus presos para acumular créditos
que posteriormente transformarían en dinero real. Diariamente podían ganar
entre 500 y 725 euros.
Los chinos no se
andan con tonterías y menos en sus cárceles.
De sobra son conocidos los trabajos
a los que se ven forzados sus presos, como trabajar las minas de carbón del
nordeste del país. Lo que no teníamos ni idea es que cuando terminaba la
jornada muchos de ellos se veían obligados pasar horas y horas jugando online para ganar créditos que
posteriormente se transformarían en dinero real. Hoy el diario inglés The Guardian cuenta con el testimonio de uno de estos reclusos.
“Los responsables de la prisión ganaron más dinero con
nuestro trabajo en internet que con nuestros trabajos manuales”, comenta Liu Dali, pseudónimo que utiliza el
diario para evitar que el preso sea reconocido. “Éramos unas trescientas personas jugando en turnos
de doce horas. Los ordenadores nunca se apagaban. Le oí decir que podían
ganar entre 500 y 725 euros al día,
dinero que nunca vimos, por supuesto”.
Dali recuerda con horror
aquellos días: “Si no completaba mi parte del trabajo sabía que me iban a castigar físicamente. Me hacían estar
con las manos en el aire antes de volver a mi habitación y ser golpeado con
tubos de plástico. Muchas veces jugábamos hasta
que apenas podíamos ver lo que teníamos delante”.
**Publicado en AlfaBetaJuega el 20-08-12**
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