El culebrón Franck Ribéry parece no haber terminado todavía. La prudencia de las últimas declaraciones del jugador, en las que se mostraba conciliador con el Bayern de Múnich ("No tienen intención de dejarme salir y, si me marcho, quiero quedar bien con el club"), podría deberse, según informa Defensa Central, a que el francés tiene en su contrato una 'cláusula de lealtad' al Bayern que le impide hablar sobre su futuro hasta el 14 de agosto. Ese día el futbolista podría declarar públicamente su enfado con su actual equipo y su deseo de jugar en el Real Madrid.
En Múnich se respira cierto temor por esta posible declaración y por ello el club habría salido en defensa de Ribéry la semana pasada tras el ataque de Beckenbauer.
En Múnich se respira cierto temor por esta posible declaración y por ello el club habría salido en defensa de Ribéry la semana pasada tras el ataque de Beckenbauer.
**Publicado en el Diario AS el 03-08-09**
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